Hoy me he levantado a las 6.00 de la mañana y me he encontrado que no tenía luz en casa (fallo de Iberdrola, no os penseis que no pago la factura), hemos sacado las linternas para poder movernos por casa y Sauron se lo ha pasado pipa!!!
Se pensaba que estabamos jugando, perseguía la luz, se agazapaba y saltaba de golpe sobre la linterna... vamos, lo que mejor me venía en ese momento para intentar poner orden dentro del caos a oscuras!!!!
Aunque le ponía cara de circunstancias, debo confesar que yo tambien me lo he pasado en grande, espero que siga siendo tan juguetón siempre. ¿Los maine siguen siendo jugones cuando son adultos o pierden esa picardía con el tiempo?
Hablemos de ruina y espina, hablemos de polvo y herida, de mi miedo a las alturas, lo que quieras, pero hablemos, de todo menos del tiempo, que se escurre entre los dedos.
(Maldita Dulzura. Vetusta Morla)
¡Vaya situación más divertida!
Los maine no creo que sean distintos a los demás gatos y como todas las especies (también los humanos) juegan más cuando son pequeños pero lo vas a disfrutar durante bastantes años, no te preocupes y disfruta todo lo que puedas de esos momentos.
:):) Ya me lo imagino correteando detrás de las luces y quitandoos las linternas! Como dice Charin el que sale juguetón suele quedarse asi : algunas veces menos que de cachorro o igual. Tuve una gata medio salvaje que llegó a los 12 años y que la encantaba jugar: la edad no la cambió.
Uli Coon no es muy juguetón y casi nunca juega solo. Pero a pesar de sus 6 años sigue provocando todos los dias para jugar a hacerse miedo, a perseguirse y esconderse por la casa: nos llevamos asi un buen rato y a mi me encanta porqué terminamos bien relajados los dos.:):)
Seguro que con Saurón te esperan momentos de alegria y diversión pura!;)
Es genial, juega hasta con la comida, bueno, con el pienso (ya que la pechuga de pollo, el jamon york y demás "delicatessen" las devora directamente). El pienso lo saca de su plato con la patita y jeuga a perseguirlo y empujarlo por toda la cocina hasta que lo "caza" y se lo acaba comiendo. No me canso de verlo jugar con todo!
Hablemos de ruina y espina, hablemos de polvo y herida, de mi miedo a las alturas, lo que quieras, pero hablemos, de todo menos del tiempo, que se escurre entre los dedos.
(Maldita Dulzura. Vetusta Morla)
Disfrútalo Albita, que estos bichitos son para disfrutarlos y para babear mucho con ellos jejejeje. Saludos
Dew Blond y sus coonies
Las palabras mal empleadas o con mala fe solo pueden causar contratiempos, golpes en la vida y dar mala imagen de nosotros mismos que evitaríamos metiendo la lengua en paladar.
Hablando de juegos... a Kobu le divierte enormemente ayudarme a hacer las camas. No sé si ésto ya lo he contado alguna vez. Me suena que sí pero no se dónde y eso era de pequeño.
Hoy le he hecho unas fotos otra vez con el tema.
Primero la cama pequeña. Nos aseguramos de que las sábanas estén limpitas porque tocó cambiarlas, y luego se va echando en cada capa que pongo.
Luego la cama grande. También se va echando encima de todo. Finalmente pongo el edredón y el se queda debajo un rato. Debajo de ese edredón es donde duerme sus grandes siestas cuando no quiere que se le moleste.
Buenooooo!!!
Ahora que ha pasado el tiempo y aprovechando que Charin ha recuperado este post, os puedo decir de primera mano que a Sauron no se le han quitado las ganas de jugar con practicamente cualquier objeto, con cualquier cosa excepto con sus juguetes, esos los tiene muertos del aburrimiento.
Por cierto, desde que esta este en casa no hay forma de hacer la cama, se agarra unos mosqueo que hasta te intenta morder. Le gusta echar la siesta en la cama deshecha, si esta hecha ni se acerca. Misterios gatunos, que le vamos ha hacer.
Hablemos de ruina y espina, hablemos de polvo y herida, de mi miedo a las alturas, lo que quieras, pero hablemos, de todo menos del tiempo, que se escurre entre los dedos.
(Maldita Dulzura. Vetusta Morla)
Es que las camas los vuelven locos. Mis persas, aunque no dormían con nosotros , sí que les gustaba echarse en la cama deshecha y ayudarme a hacer las camas también. Lo que no me ayudaban era a aplastarlas tan bien.:)
Los de mi hija también son felices incordiando cuando hace la cama. También me lo cuentan amigas que tengo con gatos, así que debe de ser general, jejejejeje.
Lo de los juguetes es desesperante. Yo estoy convencida que los que los inventan no tienen gatos.:(
Yo gasté mucho más en juguetes con los persas. Con Kobu ya me pilló escarmentada así que procuro buscar cosas que creo que le pueden gustar y casi siempre acierto.
Jajajaja,yo casi chafo un día a mi Kitty,mi marido había hecho la cama y como siempre la hace de cualquier manera....total,vi un bulto debajo del edredón y allí que fuí a estirarlo,¡¡¡ que susto me dí cuando el bulto se movió !!!
Engañame un poco al menos,dí que me quieres aún más;que durante todo este tiempo,lo has pasado fatal;que ninguno de esos idiotas, te supieron hacer reir,y que el único que te importa es este pobre infeliz......
Pues mi Yovi con 6 años y medio juega muchisimo, y siempre te esta provocando para que corras detras de el, asique vas para largo si es jugueton;);)
Si hubiera que elegir un sonido universal para la paz, votaría por el ronroneo
jajaja, ahora que lo dices, Raquel, a Sauron le encanta jugar al escondite te sigue por toda la casa, y cuando te das la vuelta para decirle algo sale pitando y se "esconde" debajo de la mesa. Mete la cabeza y deja el culo fuera, por lo que voy yo por detras diciendo en alto: donde esta Sauron que no le veoooooo? donde estaaaa? (los vecinos tienen que pensar que estoy majara), entonces me acerco y ZAS! le engancho el culete con la mano a modo de garra, y sale derrapando por el pasillo y se vuelve a "esconder" detras de la cama.
Me lo paso pipa y el se vuelve loco, se le dilatan las pupilas mogollón y corre que se las pela! Pero creo que le viene genial un poco de actividad mañanera, como no sale a la calle, asi hace algo de ejercicio.
Hablemos de ruina y espina, hablemos de polvo y herida, de mi miedo a las alturas, lo que quieras, pero hablemos, de todo menos del tiempo, que se escurre entre los dedos.
(Maldita Dulzura. Vetusta Morla)