Carácter básico del Maine Coon
El carácter del Maine Coon es el de un gato apacible, tranquilo, con una excelente capacidad de adaptación. Aunque son muy cariñosos con toda la familia, suelen elegir a una persona por encima de los demás.
Conviven perfectamente con niños a los que puede buscar para una sesión de juegos. También se adapta muy bien a la convivencia con otros animales, ya sean gatos, perros u otro animal grande. Siguen siendo felinos con lo cual, con animales pequeños como conejos, peces, roedores o pájaros es mejor tenerlos bajo vigilancia, ya que los gatos de esta raza tienen un buen instinto cazador debido a su origen rural.
Poseen una gran habilidad en sus patas, las cuales usan para comer, beber o coger cosas. Una de sus manías por así decirlo, es beber el agua directamente de su pata, primero remoja la pata en el cuenco y luego la lame. También beben de manera normal, les encanta beber con lo cual no lo hacen ascos a ningún estilo. Es probable que también las usen para agarrar los granos de pienso y llevárselos a la boca a modo de cuchara.
El Maine Coon es un gato muy juguetón, no necesitan mucho para divertirse, pero es conveniente dejar a su alcance algún juguete para gatos o motivarles con un plumero o cualquier otra cosa no peligrosa que les llame la atención. A la vez es un gato sosegado, tras un rato de juegos, necesita de descanso y si es cerca o encima de algún compañero humano, mucho mejor.