Lenguaje
El Maine Coon se expresa de una manera muy especial, tiene una gran variedad de trinos y gorjeos, como si de un pájaro se tratase. Les encanta llamar tu atención con su inconfundible ma-ma y cuando lo ha conseguido, desata su potente ronroneo.
El lenguaje de los gatos
Los gatos tienen un repertorio extenso de sonidos, entre ellos se distinguen 7 mensajes.
– La cólera que se manifiesta con un gemido.
– El miedo se interpreta con sonidos guturales.
– El sufrimiento con maullidos agudos.
– La demanda de atención con los llantos.
– La invitación a que le sigamos con trino ascendente.
– La frustración castañeteando los dientes.
– La amistad con el ronroneo.
REPERTORIO DE 63 SONIDOS
Estos 63 sonidos diferentes se distribuyen en tres tipos de vocalizaciones.
Sonidos de alta intensidad
Es el que usan los gatos para comunicarse entre ellos. Son sonidos elevados semenjantes a un griterio.
El gato tiene 4 formas de expresar su enfado son: el silbido, el siseo, el gruñido y el bufido.
Existe una curiosidad el gato emite el mismo chillido agudo cuando esta sufriendo o esta en celo.
Vocales
Cuando emite estos sonidos mantiene la boca cerrada. Son sonidos muy dulces. Cuando se encuentra inquieto reproduce un «miau», el «mrau» significa un amable ábreme la puerta, si levanta el tono y dice «marrau» exige que se le abra la puerta de inmediato, si existe negativa el gato molesto emite un «mau», se enfada y refunfuña «waw» y se queja con un «meaou».
Murmullo
Esta vocalización es el típico ronroneo del gato cuando se encuentra a gusto, tranquilo y despreocupado, aunque también puede ronronear cuando está dolorido o enfermo.
Los sonidos emitidos durante el ronroneo se traducen en: «mr-br», ronroneo, «e-mr», llamada, «me», agradecimiento, «mmr», saludo.
El ronroneo se debe a la vibración inspiratoria y espiratoria, producida por el paso del aire por la faringe y la laringe. Este sonido es emitido desde que el gato es cachorro mientras mantiene una dulce conversación con su madre, característica que conservan en la edad adulta en este caso para conversar dulcemente con su dueño.